martes, 20 de noviembre de 2012

Quién audita al que audita al que audita...



"Querer informarse sin esfuerzo es una ilusión que tiene que ver con el mito publicitario más que con la movilización cívica. Informarse cansa y a este precio el ciudadano adquiere el derecho de participar inteligentemente en la vida democrática" Ignacio Ramonet.




En la actualidad se pueden constatar las infinitas oleadas de críticas contra el funcionamiento del Sector Público en todas sus facetas, presupuestos deficientemente dimensionados, sus empleados cobran (22.790,20€) un 30% por encima de la media (ya de por sí ridícula, 16.489€) de los sueldos del Sector Privado según el INE y sus particulares metodologías de cálculo.

El gasto o la inversión públicos no superan prácticamente ningún análisis de oportunidad y en muchas ocasiones casi ningún análisis en términos de economía, eficacia, eficiencia y de legalidad.

Muchas de estas críticas desde luego están justificadas. El sistema no es perfecto, falla, es francamente mejorable, los logros están ya olvidados. Pero, el sistema no solo falla para el Sector Público.

Junto con este aluvión de críticas también podemos comprobar la existencia de, si no un completo silencio, sí un mutismo preocupante con respecto a las deficiencias/aberraciones/infamias del Sector Privado. El relativismo con el que trata la prensa el macabro juego en el que participan muchas empresas privadas no tiene calificativos en ningún idioma.

Es difícil encontrar artículos críticos, serios y comprometidos y los que existen en seguida se les tilda de vanos o sectareos, da exactamente igual de dónde vengan, quién los redacte y los datos que contengan. No digo que este vaya a ser uno de ellos (el lector juzgará por sí mismo) y tampoco pretendo decir que no existan pero lo que sí que es cierto es que el peso de unos y de otros en las hemerotecas es dispar.

Los fallos del sistema a los que antes nos referíamos los sufre la sociedad en general pero es el propio sector privado el que más los sufre en particular. ¿A qué me refiero con esto? No me cabe duda que es de dominio público el descrédito absoluto de las agencias de calificación, las cuales puntúan en función de los virus que infectan sus ordenadores justo antes de una crisis financiera o, en función del número de productos que contratan con ellas, favoreciendo a los que más dinero se gastan en sus espúreos servicios[1]. Aún habiéndose demostrado como entes absolutamente incompetentes, no solo a la hora de calificar sino también a la hora de predecir la crisis en general y el crack bursátil de 2007 en USA como su génesis en particular, siguen manteniendo negocio e incluso aumenta[2] porque las siguen contratando.

Todo ello apunta a que sigue interesando que los vaivenes y las letras A,B,C y los signos + y – se sigan repartiendo entre tres amigos porque de esa manera, por lo visto, se gana mucho dinero.

Pues bien, a esta serie de catastróficas desdichas se unen además las empresas de auditoría y consultoría. Estas, son empresas de servicios profesionales con experiencia o conocimiento específico en un área, que asesoran a otras empresas, a grupos de empresas, a países o a organizaciones en general[3]. Dentro de este particular grupo de elite existen las denominadas “The Big Four” (Las cuatro grandes): Deloitte, PwC (antes PricewaterhouseCoopers), Ernst & Young y KPMG.

Estas, al igual que las agencias de calificación tienen, si no el monopolio, sí el oligopolio de “la verdad” sobre qué es un balance saneado en una empresa y lo que no lo es. Esta verdad parece ser que solamente es su verdad ya que, de nuevo y al igual que las agencias de calificación, no hay una que no esté hasta el cuello de, podríamos decir, “pufos” o “cantadas” con perdón. Veamos algunas.

Antes de existir este selecto grupo de expertos consultores y auditores existía una agencia denominada Arthur Andersen, el final de Arthur Andersen sobrevino cuando la compañía, como auditores de Enron Corporation, fue sentenciada por los tribunales federales de Houston el sábado, 16 de junio de 2002, por delitos de obstrucción a la justicia, y de destrucción y alteración de documentos relacionados con la quiebra de Enron y las irregularidades cometidas por dicha corporación. La multa impuesta fue de unos 500.000 dólares, y además se privó a la compañía de poder seguir ejerciendo sus funciones de auditoría y asesoría para las sociedades registradas en la bolsa de valores de los Estados Unidos.

Siendo justos hay que decir que el 31 de mayo de 2005 la Corte Suprema de Estados Unidos, a raíz de una apelación por parte de Arthur Andersen, absolvió a la compañía basándose en la vaguedad de las pruebas presentadas por la acusación, estimando además que el jurado del juicio condenatorio estuvo «aleccionado» por la fiscalía para culpabilizar a la auditora «por destruir papeles, incluso si no hubiera ánimo de obstruir a la Justicia». Sin embargo, la compañía no pudo recuperarse de la pérdida de prestigio y capital humano y fue incapaz de retomar la actividad profesional anterior, ni siquiera a menor escala[4]. En cualquier caso la primera, en su día, de las auditoras a nivel mundial, fue incapaz de realizar de forma correcta sus funciones (a sabiendas o no eso le corresponde determinarlo a los jueces) y con una sola mala operación con uno solo de los seguro cientos de clientes que tenía en Estados Unidos, mandó al garete un empresa de prestigio en el ramo de consultoría/auditoría.

Además qué duda cabe de que Enron fue una empresa declarada durante 6 años consecutivos por la revista Fortune como la más innovadora, empleaba a 21.000 personas y terminó en la quiebra por aplicar técnicas de contabilidad creativa seguramente recomendadas por dicha consultora.

Una vez que Arthur Andersen queda en desprestigio, prácticamente todos sus “activos” pasaron a formar parte de la firma Deloitte, otra gran conocida y segunda de las auditoras/consultoras a nivel mundial. Emplea a 182.000 expertos y factura 28.000 millones[5]. Esta firma, al igual que la anterior, también es estadounidense y es calificada por “Fortune” como una de las 100 mejores compañías para trabajar. Seguramente tenga un largo historial de grandes éxitos pero las cloacas de esta compañía también despiden cierto hedor de vez en cuando. Como en el caso Parmalat en Italia donde el juez condena a los auditores de Deloitte como cómplices de los altos directivos de la empresa Parmalat cuando se descubre que una empresa subsidiaria no tenía un dinero que decían que sí tenía. Nada, solamente estamos hablando de 3.940 millones de euros. Y digo nada porque después del escándalo parece ser que la deuda neta de la compañía era de 13.200 millones de euros[6]. También tuvo un pequeño percance con el Banco Panamericano al que parece que le faltaron de repente 3.500 millones de euros.

El historial no acaba aquí, por supuesto, pero esta vez vamos a acercarnos a nuestra amada tierra, donde tenemos a bien contar con sus profesionales servicios. O no, ya que parece ser que Deloitte fue auditora del Banco de Valencia, sí, el que adelantó la fianza millonaria de Jaume Matas[7]. Por lo visto sus expertos profesionales mientras auditaban se les pasó por alto la enorme exposición al ladrillo del Banco y la, digamos, inadecuada calificación de los créditos “incobrables” que parece que entonces sí que lo eran pero al final resultó que no. Este error fue cuantificado por el Banco de España en 1.000 millones de euros pero le costó una “inversión” al FROB de 3.000 millones de, por supuesto, fondos públicos[8] de la odiado e ineficiente Estado/Administración.

No obstante, y creo que en nuestra querida España, la palma se la lleva con el conocido caso Bankia en el que como todos sabemos en 2011 pasó de tener 12.000 millones de beneficio a 309 millones, que es un descuadre importante si no fuera porque cuando cambia de Presidente y consolidan el Balance arroja unas pérdidas de 2.979 millones de euros. Resulta que Deloitte firmó en dos ocasiones (17 de junio y 28 de julio) diciendo respecto de las cuentas de Bankia que "En nuestra opinión, los estados financieros intermedios resumidos consolidados se han elaborado adecuadamente, en todos los aspectos significativos, de acuerdo con normas contables que le resulten de aplicación”. Leyendo esto, está claro que para superar la pruebas de admisión de Deloitte tienes que tener alma de poeta. La cara mala es que Bankia está nacionalizada, le debe a las arcas públicas 23.500 millones de euros y posiblemente mucho más al Banco Central Europeo. Pero bueno, un fallo lo tiene cualquiera[9].

Respecto a lo dicho se podría decir, que la opinión que aquí se vierte es tendenciosa o que a toro pasado todos somos unos sabios pero cuando es KPMG (otra consultora) la que cuestiona que cuando solo una firma se encarga de auditar el 85% del sistema financiero, difícilmente lo pueda hacer de una forma profesional ya es otra cosa[10]. Y es que ahora se quejan del alto nivel de concentración en el sector auditor de las finanzas y que es el Sector Público el que lo tiene que evitar[11]. ¿En qué quedamos? ¿El mercado no se autoregulaba?. ¿Ahora el problema no es el Estado? ¿acaso Milton Friedman no tenía razón y tiemblan los pilares del padrenuestro neoliberal?.

Respecto de la quejosa KPMG a la que no la gusta que Deloitte audite tanto el sector financiero, no se sabe si es porque está en contra de las concentraciones del mercado o porque se queda sin una parte del pastel, tampoco se va de rositas. KPMG es una auditora, consultora con su sede en Países Bajos trabaja en todo el mundo, cada KPMG en cada Estado funciona de forma “independiente” pero a su vez forma parte de KPMG International con forma de cooperativa registrada en... oh! Suiza (cantón de Zug). Esto puede tener dos motivos no excluyentes entre sí. El primero adoptar la estructura de un swiss verein[12]. Esta es una estructura social (o empresarial) suiza, con alguna connotación de las cooperativas, que requiere muy poco papeleo y no necesita inscripción registral. Algunas grandes compañías de servicios profesionales multinacionales (por ej., Deloitte TT, Hogan Lovels, Baker & McKenzie, ...) utilizan esta estructura para limitar y contener su responsabilidad por los actos de alguna de sus compañías/oficinas asociadas, típicamente organizadas por países. Su característica fundamental es que los socios que la forman (personas o empresas) tienen responsabilidad limitada entre sí, esto es, la responsabilidad de uno no se comunica a los demás ni a la Unión. Para exigirles responsabilidad se ha intentado, con escasísimo éxito, el camino del Levantamiento del velo o el de la Responsabilidad subsidiaria del Principal por los actos de sus Agentes[13]. En definitiva que de los pufos de KPMG España responde de forma limitada esta y nunca podrá hacerlo KMPG International.

El segundo motivo es que Zug es un paraíso fiscal dentro del paraíso fiscal que ya es Suiza. Esta ciudad es la gran favorita de muchas firmas a nivel internacional porque la fiscalidad es testimonial. Con tan solo 23.000 habitantes tiene registradas unas 13.000 sociedades. No está nada mal.

KPMG cobró a la Xunta de Galicia un millón de euros por un informe justificativo favorable para la fusión de Caixanova y Caixa Galicia calificándola de “solvente y viable” como todos hemos podido comprobar. Además esta Auditora tiene en su haber el no haber encontrado en 20 años ninguna irregularidad en las cuentas de la CAM que más tarde la EBA (Autoridad Bancaria Europea) le anotaba unas pérdidas ocultas de 4.587 millones de euros. Como podéis comprobar hablamos de unas cifras con las que cualquiera puede tener un despiste.

A nivel internacional, KPMG también hizo sus “deberes” en 2005 y en Estados Unidos se le sancionó por ayudar a evadir miles de millones a través de paraísos fiscales por un total de 456 USD.

Price Waterhouse Coopers (PwC) por su parte es la más grande de las cuatro firmas. Por volumen de facturación hablamos de 29.200 USD en 2011 empleando a 169.000 personas en 153 países[14]. No por ser la más grande en este caso es la más honrada y la lista de escándalos y cifras también es notable: el caso Willie Nelson de fraude fiscal en 1990 por 32 USD, la controversia con AIG (American International Group) en cuanto a las operaciones con valores hipotecarios y los CDS (seguros contra impagos)que llevó a la primera compañía de seguros al rescate gubernamental, el caso Tyco en 2007 en el que tuvo que desembolsar 229 USD, el caso del Northern Rock Bank por el que recibió 1,8 millones de libras y a continuación tuvo que ser rescatado sin que figurara en el informe ninguna advertencia sobre el modelo de riesgo que estaba siguiendo la entidad. En España consultores de PwC están declarando en el juicio de la CAM que elaboraron los informes sobre los estados financieros y sobre las indemnizaciones multimillonarias autoadjudicadas por antiguos gestores entre ellas la de Maria Dolores Amorós que se adjudicó una pensión vitalicia de 370.000 euros anuales además de la indemnización extra de 10 millones de euros[15].

Para finalizar, Ernst&Young con una facturación de 22.900 USD anuales en 2011 y 152.000 empleados tiene su sede en Londres y su lema es “Quality in everything we do” (Calidad en todo lo que hacemos). A partir de 2007 deberían haber cambiado el everything (todo) por something (algo). E&Y tiene el dudoso honor de haber dado su bendición al instrumento financiero “Repo 105”. Esta práctica fue utilizada por Lehman Brothers para maquillar (véase engañar) activos incobrables como activos de absoluta liquidez con el fin de ocultar a inversores, entidades reguladoras y agencias de calificación la verdadera situación económica y de liquidez de la entidad financiera[16]. Todos sabemos cómo acaba la historia de Lehman Brothers y lo que es peor, la historia que empieza después. Historia valorada en 50.000 millones USD. A causa de esta connivencia en el engaño entre E&Y y L.B. el Fiscal General de New York interpuso una demanda contra la auditora por valor de 150 USD. 


No acaba aquí la lista de desengaños contables, de hecho sin mucho esfuerzo salen casos como el de “Equitable Life” (2,6 millones de Libras), Anglo Irish Bank (misma operación que con Lehman Brothers), Sons of Gwalia (125 USD), Akai Holdings (200 USD), Bally Total Fitness (8,5 USD).

E&Y también tiene “asuntillos” en nuestro amado suelo patrio. El Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas multó con 1,1 millón de euros por la revisión de cuentas favorable y sin salvedades que hizo de la empresa Martinsa Fadesa en 2007 que meses más tarde entró en concurso voluntario de acreedores. Años antes, en 1993, no advirtió a los socios cooperativistas de PSV en relación a la realidad contable de esta por lo que se vió abocada a la quiebra. A causa de esto, el Supremo condenó en 2008 a E&Y y a Allianz, al pago de 5 millones de euros a los cooperativistas y más tarde, en 2011, en un nuevo procedimiento al pago del 7% del coste inicial de las casas que no se pudieron construir por la cooperativa[17].


Para finalizar y siendo justos hay que decir que el fin o el objetivo de estas empresas es loable y seguramente en muchos casos ha sido significativamente útil a otros sujetos que hayan contratado sus servicios. Es más, con todo lo expuesto tampoco quiero dar a entender que estas empresas deban desaparecer o finalizar sus actividades. Lo que sí que es cierto es que con este pequeño artículo queda un poco más claro que nadie está libre de pecado. De hecho no por ser cometidos por empresas privadas esos pecados son menores o sus consecuencias menos gravosas para otras empresas privadas, los Estados y los ciudadanos en particular.



En Salamanca, a 19 de noviembre de 2012, escuchando Rock FM (La casa del rock) Oldies but Goldies, un pequeño vicio.



"La sabiduría sirve de freno a la juventud, de consuelo a los viejos, de riqueza a los pobres y de adorno a los ricos" Diógenes de Sinope.





[1]http://economia.elpais.com/economia/2012/10/19/actualidad/1350676156_941300.html

[2]http://elpais.com/diario/2012/01/22/economia/1327186804_850215.html

[3]http://es.wikipedia.org/wiki/Consultor%C3%ADa

[4]http://es.wikipedia.org/wiki/Arthur_Andersen

[5]http://es.wikipedia.org/wiki/Deloitte

[6]http://www.monografias.com/trabajos90/auditoria-forense-aplicada-lo-administrativo-y-financiero/auditoria-forense-aplicada-lo-administrativo-y-financiero2.shtml

[7]http://www.abc.es/20120413/espana/abci-juez-matas-fianza-201204131755.html

[8]http://www.elconfidencial.com/economia/2011/11/23/deloitte-no-vio-las-irregularidades-en-creditos-y-provisiones-de-banco-de-valencia-88194/

[9]http://elconfidencialdigital.com/dinero/076087/rodrigo-rato-y-angel-acebes-declaran-la-guerra-a-deloitte-la-auditora-acusa-a-los-consejeros-y-la-antigua-cupula-de-bankia-replica-que-no-hubo-informe-alertando-del-agujero-hasta-marzo

http://www.expansion.com/2012/05/25/empresas/banca/1337972604.html

[10]http://ccaa.elpais.com/ccaa/2012/07/06/valencia/1341571663_237445.html

[11]http://www.publico.es/dinero/139439/una-sola-firma-audita-la-mitad-del-beneficio-de-la-bolsa-espanola

[12]http://en.wikipedia.org/wiki/Swiss_Verein

[13]http://www.burbuja.info/inmobiliaria/burbuja-inmobiliaria/230052-a-que-no-sede-de-kpmg-y-2.html

[14]http://es.wikipedia.org/wiki/PricewaterhouseCoopers

[15]http://ccaa.elpais.com/ccaa/2012/03/15/valencia/1331818579_383382.html

[16]http://www.ieco.clarin.com/economia/Escandalo-corporativo-demandan-Ernst-Young_0_394160853.html

[17]http://economia.elpais.com/economia/2011/02/16/actualidad/1297845190_850215.html

miércoles, 31 de octubre de 2012

Seamos cínicos...

Se dice de Diógenes de Sínope que vivía en una tinaja, en lugar de una casa, y que de día caminaba por las calles con una linterna encendida diciendo que “buscaba hombres” (honestos). Sus únicas pertenencias eran: un manto, un zurrón, un báculo y un cuenco (hasta que un día vio que un niño bebía el agua que recogía con sus manos y se desprendió de él).

Este primer post, con un título tan peculiar tiene dos objetivos, el primero, el necesario reconocimiento a la persona que me dio a conocer dicho personaje, José Alberto Cuesta, el cual es el autor de dos libros en relación con la filosofía cínica “Filosofía Cínica y Crítica Ecosocial” (Ediciones del Serbal, 2006) y “Ecocinismos. La crisis ecológica desde la perspectiva de la filosofía cínica” (Biblioteca Buridán. Barcelona, 2011).

El segundo objetivo es el poner de manifiesto la necesidad de cambio de mentalidad y de moralidad. Es evidente que las cosas no van bien, el modelo o sistema es evidente que no funciona o al menos de la forma que desearíamos. Y, si bien algunos son más culpables que otros, no podemos exigir un cambio sin empezar por nosotros mismos. Es aquí donde entra en juego la antigua filosofía cínica. La necesidad de que todos nos volvamos un poco cínicos y que nos entre un poco ese síndrome de Diógenes pero bien entendido.

La escuela cínica viene a afirmar que el hombre lleva en sí mismo los elementos para ser feliz y conquistar su autonomía, de ahí el desprecio por lo material y las riquezas. Al hilo de esto vienen a afirmar que el hombre que menos necesita es el que es más feliz, frase que hoy está siendo explotada por una famosa marca sueca de muebles, lo cual no deja de sorprender. Toda esta forma de pensar tiene su aplicación práctica en el resto de aspectos de la civilización y su evolución, desarrollo etc. No puedo dejar de recordar la frase que le dice Brad Pitt a Edward Norton en "El Club de la Lucha" de "tenemos empleos que odiamos para comprar mierdas que no necesitamos". En definitiva, un crisis económica, laboral, moral, ecológica... sistémica.


Esto podría ser un breve resumen de la verdadera crisis que sufrimos. La civilización no puede seguir enfrentándose al futuro con esta forma de pensar, no puede, no porque no quiera, sino porque no se lo puede permitir.


Desde luego, lo dicho, es radicalmente opuesto a cómo quieren las compañías que veamos las cosas puesto que cada día hacen que necesitemos más artilugios que nos hagan plantearnos "¿cómo podía yo vivir antes sin esto?". No somos dueños de nuestro destino, no somos independientes y lo que es peor de todo, hemos renunciado a ello de forma voluntaria sumisa y servil y no precisamente para un bien común sino para el enriquecimiento de unos pocos que solo piensan en sus propios intereses. Seguimos siendo muchos esclavos y pocos los "patricios" que deciden nuestros designios. Seguimos echando la culpa a los dioses de nuestras desgracias y de nuestra mala suerte y regocijándonos en nuestros propios y pírricos logros.

Necesitamos cambiarnos por dentro. Necesitamos convertirnos en los hombres (y mujeres) que Diógenes buscaba sin éxito por las calles.

Rodrigo, en Salamanca a 31 de octubre de 2012, escuchando la canción “Precipio” de Loquillo BSO de la serie “El Crematorio”.



Pasó un ministro del emperador y le dijo a Diógenes:
"¡Ay, Diógenes! Si aprendieras a ser más sumiso y a adular más al emperador, no tendrías que comer tantas lentejas."


Diógenes contestó: "Si tú aprendieras a comer lentejas no tendrías que ser sumiso y adular tanto al emperador".